¿QUE ES LA DIABETES MELLITUS?

La diabetes mellitus es una enfermedad producida por una alteración del metabolismo (metabolismo es un conjunto de reacciones químicas que tienen lugar en las células del cuerpo), caracterizada por un aumento de la cantidad de glucosa en la sangre y por la aparición de complicaciones microvasculares (enfermedad de los vasos sanguíneos finos del cuerpo, incluyendo vasos capilares) y cardiovasculares (relativo al corazón y los vasos sanguíneos) que incrementan sustancialmente los daños en otros órganos (riñones, ojos, corazón, nervios periféricos) y la mortalidad asociada con la enfermedad y reduce la calidad de vida de las personas afectadas.

La diabetes afecta a entre el 5 y el 10% de la población general, esta variación depende de los estudios consultados. Debe tenerse en cuenta que se estima que por cada paciente diabético conocido existe otro no diagnosticado. Su frecuencia aumenta significativamente con la edad y también con el exceso de peso y la vida sedentaria, por estos motivos se espera un importante aumento del número de diabéticos en los próximos decenios.

En la última Encuesta Nacional de salud del año 2001 (España) , un 5,6% de la población, había sido diagnosticado de diabetes, la cifra alcanzaba el 16% en los mayores de 65 años, en la encuesta del año 1993 se declaraba afecto de diabetes sólo el 4,1%.

¿Cuáles son los síntomas de la Diabetes?

Los síntomas que produce la enfermedad son diferentes dependiendo del tipo de diabetes-

En la forma más común que es la tipo 2 los síntomas pueden ser escasos o poco llamativos:

  • Sed
  • Aumento de la cantidad de orina
  • Aumento del apetito
  • Picores
  • Infecciones
  • Enfermedades cardiovasculares asociadas

¿Cómo se diagnostica la diabetes?

La Diabetes se diagnostica midiendo la cantidad de glucosa en la sangre (Glucemia). La forma ideal es medirla en la sangre venosa y con la persona en ayunas. A esta cifra la denominamos Glucemia Basal.

Hay otras formas y circunstancias de medir la cantidad de glucosa en la sangre; la glucosa medida en sangre capilar (pinchando un dedo) o en las personas que no están en ayunas, estas cifras pueden ayudar o incluso orientar al diagnóstico, pero la que se debe emplear como fiable para el diagnóstico, es la glucosa en sangre venosa y con el sujeto en ayunas (GLUCEMIA BASAL EN PLASMA VENOSO).

Existe una prueba llamada Prueba de Tolerancia Oral a la Glucosa (PTOG) que consiste en administrar una cantidad determinada de glucosa a la persona en ayunas y comprobar como se comporta la glucosa en la sangre a lo largo de un cierto tiempo. Eso nos permite saber si esa persona tiene alterados los mecanismos de metabolización de la glucosa. Esta prueba hoy en día se usa casi en exclusiva en las mujeres embarazadas.

¿Cuáles son las cifras de glucosa en sangre normales y a partir de cuándo hablamos de Diabetes?

La cifra de glucosa en sangre se considera normal cuando es menor de 110 mg/dl.

Hablamos de Diabetes Mellitus si…

  1. La glucemia en ayunas en plasma venoso es mayor o igual 126 mg/dl (7 mmol/l) al menos en dos ocasiones.
  2. Hay síntomas de diabetes (ver arriba) y una glucemia al azar en plasma venoso mayor o igual 200 mg/dl (11,1 mmol/l). Aunque no se esté en ayunas. No es necesaria una segunda determinación.
  3. La glucemia en plasma venoso a las 2 horas de la Prueba de Sobrecarga oral con 75 g de glucosa es mayor o igual a 200 mg/dl (11,1 mmol/l).

¿Qué tipos de diabetes existen?

  • Diabetes Tipo 1: resultado de la destrucción de las células del páncreas que producen la insulina (células beta) y que predispone a una descompensación grave del metabolismo llamada cetoacidosis. Es más típica en personas jóvenes (por debajo de los 30 años).
  • Diabetes Tipo 2: Caracterizada por resistencia a la insulina que puede estar asociada o no con una deficiencia de insulina y que puede estar presente con muy pocos síntomas durante mucho tiempo. Esta forma es más común en personas mayores de 40 años aunque cada vez es más frecuente que aparezca en sujetos más jóvenes.
  • Diabetes Gestacional: diabetes cuyo inicio se reconoce durante el embarazo. Las mujeres que la padecen deben ser estudiadas después del parto ya que la diabetes puede o no persistir después.
  • Otras formas de diabetes: condiciones variadas que consisten básicamente en formas específicas, genéticas de diabetes, o diabetes asociada con otras enfermedades o el uso de fármacos. Entre las más comunes están las enfermedades del páncreas y el uso de corticoides en algunos tratamientos.
  • Metabolismo Alterado de la Glucosa Existen algunas situaciones clínicas intermedias entre la normalidad y la diabetes confirmada, se conocen como situaciones de Metabolismo Alterado de la Glucosa, actualmente se ha vuelto a rescatar para denominarlas el término prediabetes que estuvo abandonado durante algunos años. Esta alteración se caracteriza por:

      • Alteración metabólica intermedia entre la normalidad y la diabetes.
      • Son un factor de riesgo para desarrollar diabetes mellitus y enfermedades cardiovasculares.

Existen dos formas clínicas:

  • Glucemia basal alterada: (GBA): Glucemia plasmática en ayunas mayor de 110 mg/dl y menor de 126 mg/dl.
  • Tolerancia alterada a la glucosa: (TAG): Glucemia plamática a las 2 horas de la PTOG con 75 gr de glucosa mayor de 140 mg/dl y menor de 200 mg/dl.

¿Quiénes deben someterse a pruebas para detectar una posible diabetes?

Se ha demostrado que sólo las personas de cierto riesgo deben ser investigadas para detectar una posible diabetes silente; estos son:

  • Mayores de 45 años (cada 3 años)
  • A cualquier edad y cada año si:

      • Tienen antecedentes de Diabetes Gestacional, Intolerancia a glucosa o Glucosa Basal Alterada.
      • Mujeres con antecedentes de hijos nacidos con más de 4,5 kg.
      • Personas con exceso de peso (Indice de Masa Corporal mayor o igual a 27 kg/m2 o mayor o igual a 120% del peso ideal).
      • Personas con Hipertensión Arterial.
      • Colesterol HDL menor o igual a 35 mg/dl y/o triglicéridos mayores de 250 mg/dl).
      • Historia familiar de diabetes en primer grado.

Método Recomendado: Glucemia en ayunas (GB) en plasma venoso.

¿Puede prevenirse la diabetes?

  • En sujetos con elevado riesgo de desarrollar una diabetes tipo 2 la implantación de programas de pérdida de peso y planes de ejercicio físico pueden contribuir a la disminución del riesgo.
  • Las personas con obesidad o sobrepeso y sedentarias tienen un riesgo muy elevado de desarrollar un diabetes tipo 2. Existen diferentes estudios clínicos que demuestran que una reducción moderada de peso y un programa de ejercicio físico de tan sólo media hora diaria durante al menos cinco días a la semana, experimentan una drástica reducción del riesgo de desarrollar una diabetes.
  • Por su parte la prevención de la diabetes tipo 1 entra dentro del campo experimental limitándose actualmente al campo de la investigación.

¿Por qué es tan importante prevenir la diabetes y detectarla lo antes posible?

La DM es una enfermedad que causa un aumento muy importante del riesgo de padecer y morir de una enfermedad cardiovascular.

Esta es una asociación tan fuerte desde el punto de vista clínico que hoy muchos autores y comités de expertos, recomiendan tratar al paciente con diabetes como si ya fuese seguro que sus arterias están dañadas en lo referente a otros factores de riesgo cardiovascular como cifras de Colesterol, tensión arterial, uso de fármacos antiagregantes plaquetarios etc.

Pero además la diabetes y sobre todo la diabetes mal controlada produce daños en múltiples órganos y sistemas además de en los grandes y pequeños vasos sanguíneos del organismo; así puede causar.

  • Por alteración de los grandes vasos: Infarto de miocardio, falta de riego en las extremidades, accidentes cerebrovasculares, enfermedad por arteriosclerosis precoz. Etc.
  • Daños en la retina de los ojos Retinopatía diabética.
  • Daños en los riñones con nefropatía diabética.
  • Daños en el sistema nervioso con neuropatía diabética.
  • Diversos daños en la piel con dermopatía diabética.

¿Se pueden prevenir estas complicaciones?

Existen estudios que demuestran que el control óptimo de la diabetes permite prevenir o retrasar la aparición de prácticamente todas las complicaciones.

En la diabetes tipo 1 el estudio conocido como DCCT (Diabetes Control Complications trial).

En la diabetes tipo 2 el estudio conocido como UKPDS (United Kingdom Prevention Diabetes Study).

En ambos se ha demostrado que un buen control metabólico, es crucial para prevenir la presencia de complicaciones tanto a medio como a largo plazo.

¿Cómo se trata la Diabetes?

El tratamiento de la diabetes se sustenta en seis pilares básicos:

  1. Plan de alimentación: Un plan de alimentación va más allá de lo que entendemos por una dieta. Debe ser un proyecto individualizado a las necesidades de cada persona, sus preferencias y debe contemplar objetivos relacionados con la consecución de un peso óptimo, situación laboral, disponibilidades etc.

  2. Plan de ejercicio físico: Presenta las mismas características de individualización que la alimentación en cuanto a preferencias, objetivos etc. Lo ideal es alcanzar al menos 30 minutos diarios de ejercicio físico activo y preferentemente aeróbico (Caminar deprisa, bicicleta, remo…).

  3. Medicación: existen múltiples y variadas disposiciones farmacológicas para el tratamiento de la Diabetes. Lo importante es que Vd. observe escrupulosamente las normas que su médico le indique tanto en cuanto a dosis como en cuanto a horarios, relación de la medicación con la comida, precauciones con el alcohol, la conducción etc. Consulte con un profesional sanitario. La mayor parte de los tratamientos farmacológicos de la Diabetes pueden causar hipoglucemias (Bajadas peligrosas de la cifra de glucosa en la sangre) y Vd. debe saber como evitarlas y como tratarlas si se presentan.

  4. Hábitos generales de higiene

    • NO FUMAR. Quizás el principal consejo que todo paciente con diabetes debe recibir es que NO FUME. El tabaco es un importante factor de riesgo cardiovascular en todos los ciudadanos pero el aumento de riesgo que origina en los diabéticos es mucho mayor.
    • El desarrollar hábitos que permitan una vida regular y ordenada, con horarios de comidas y de sueño regulares, horarios para el ejercicio físico pautado etc. Son sumamente aconsejables.
    • Los cuidados e higiene de los pies del diabético y de la piel en general también deben ser considerados.

  5. Plan de autocontrol: todo paciente diabético debe ser instruido en las técnicas básicas del autocontrol de su enfermedad y en el aprendizaje de las acciones básicas que debe emprender ante las incidencias más comunes; cambios de horario, descompensaciones, hipoglucemias, enfermedades intercurrentes etc. Con el fin de alcanzar el mayor grado de autonomía que pueda.

  6. Controles periódicos:

    • Una parte fundamental del tratamiento de la diabetes es la relacionada con los controles periódicos, no sólo en relación con la realización de pruebas analíticas que permitan afirmar o modificar el resto del tratamiento sino las relacionadas con la detección precoz de complicaciones de la enfermedad. Esto incluye detección precoz de la Retinopatía Diabética mediante el examen periódico del fondo de ojo por un profesional competente, detección de microalbuminuria para cribado de daño renal, control periódico de la Tensión Arterial, evaluación del riesgo cardiovascular global con las pruebas que sean necesarias etc.
    • Los controles periódicos deben servir al paciente diabético y al profesional que le atiende para evaluar los objetivos fijados y reajustarlos.

El equipo de profesionales que trata a un paciente con Diabetes, deberá establecer de acuerdo con el propio paciente, las pautas y objetivos a alcanzar en cada una de estas áreas, ajustándose todo lo posible a las preferencias del propio paciente y haciéndole partícipe de los objetivos y resultados obtenidos, buscando la forma más factible de remover obstáculos y promover actitudes que permitan alcanzar un buen control.

La educación del paciente con diabetes, proceso donde se integra toda la formación e información contenida en todos los puntos antes reseñados, se ha revelado como una de las acciones más efectivas para conseguir los objetivos de un buen control de la enfermedad.

¿Qué otros estudios complementan el estudio y evaluación del enfermo con Diabetes?

Existen múltiples estudios y pruebas que los profesionales sanitarios que son responsables del cuidado del enfermo de diabetes realizan para mejorar el conocimiento y controlar el estado evolutivo de la enfermedad.

En este apartado explicaremos algunas de las más comunes para conocer para qué sirven y cual es su interpretación.

  • Hemoglobina glicosilada o Glicohemoglobina: Esta prueba de laboratorio, se realiza en la sangre y determina que proporción de la sustancia hemoglobina se encuentra unida a la glucosa. Sirve para tener un conocimiento de cómo ha estado la cifra de glucosa en la sangre en los últimos dos o tres meses. Es un parámetro muy usado para conocer si el control metabólico es adecuado.
  • Microalbuminuria: Consiste en determinar en la orina del paciente si se eliminan pequeñas cantidades de albúmina. Esta eliminación se ha comprobado que es un buen parámetro para medir mínimas lesiones en los riñones (nefropatía diabética) y para predecir algunas complicaciones vasculares.
  • Estudio de otros elementos que pueden ayudar a valorar el riesgo cardiovascular global del diabético: Colesterol total, Hdl-Colesterol, Ldl-Colesterol, Triglicéridos. Determinación de la Tensión arterial, Electrocardiograma.
  • Estudio del fondo de ojo con dilatación de la pupila; se realiza para identificar signos precoces de enfermedad en la retina producida por la diabetes (Retinopatía diabética).
  • Exploración de los pulsos en las arterias de los pies y examen de los mismos incluyendo exploración de la sensibilidad; se realiza para descartar la existencia del llamado pie diabético.

¿COMO HABLAR CON SUS HIJAS SOBRE LA MENSTRUACION?

La llegada de la menstruación es un momento trascendental en la vida de una niña. Algunas niñas reciben esas primeras gotitas de sangre con alegría o alivio, mientras que otras experimentan cierto desconcierto e incluso miedo. Independientemente de la reacción, la llegada del primer período menstrual tiene el mismo significado para cualquier niña: es una prueba de que se está convirtiendo en mujer.

Como promedio, la mayoría de las niñas tienen su primer período entre los doce y los trece años de edad (aunque algunas lo hacen antes o más tarde). Pero, si usted espera a que a su hija tenga su primer período para hablar con ella sobre la menstruación, será demasiado tarde.

Entonces, ¿cómo hablar con su hija sobre la menstruación, proporcionándole no solo información, sino también consejos y apoyo antes de que llegue el gran día? O ¿qué decirle a su hijo? (Los niños también se hacen preguntas sobre este tema). Antes de hablar con sus hijos sobre la menstruación, es importante que usted tenga muy claro en qué consiste exactamente el proceso.

Sobre la menstruación

A principios del siglo XX, la menarquia (el término médico que se utiliza para referirse al primer período menstrual) tenía lugar entre los catorce y los quince años. Por diversas razones, incluyendo una mejor nutrición, actualmente las niñas empiezan a menstruar entre los diez y los dieciséis años. Pero la menstruación no consiste solo en tener el período. Es un indicador de que una chica puede quedarse embarazada.

Durante el ciclo menstrual, se liberan hormonas desde distintas partes del cuerpo para ayudar a preparar al organismo para el embarazo. Esa preparación se inicia cuando los ovarios (dos órganos de forma ovalada que se encuentran a ambos lados de útero o vagina) producen dos tipos de hormonas: el estrógeno y la progesterona. Estas hormonas desencadenan ciertos cambios en el endometrio (la capa de tejido que recubre el interior del útero). Luego otras hormonas segregadas por la hipófisis estimulan la maduración del ovocito (la célula reproductora femenina) y su liberación desde el ovario.

La liberación del ovocito se denomina ovulación, y tiene lugar a medio ciclo –generalmente el día 14 de un ciclo menstrual típico de 28 días. Una vez liberado, el ovocito se desplaza desde el ovario hasta el útero a través de las trompas de Falopio (dos tubitos que conectan el útero con los ovarios).

Si el ovocito es fecundado por un espermatozoide, tardará de dos a cuatro días en descender por las trompas de Falopio y anidará en la gruesa capa del endometrio, muy irrigada de sangre, que recubre el interior del útero. Si no es fecundado, el ovocito empezará a degenerar, descenderán los niveles de estrógeno y progesterona, y el endometrio se desprenderá y se expulsará al exterior en forma de sangrado; este sangrado es lo que se conoce como menstruación o período.

Un ciclo menstrual dura desde el primer día de un período menstrual hasta el primer día del próximo período. El ciclo menstrual típico de una mujer adulta es de 28 días, aunque hay algunos que duran solo 22 y otros de hasta 45. La fase de sangrado del ciclo menstrual suele durar unos cinco días, aunque esto también puede variar. Durante un período una mujer elimina de dos a cuatro cucharadas (de 30 a 59 ml) de fluido menstrual.

Durante los primeros años de menstruación los ciclos menstruales a menudo son irregulares. Pueden ser más cortos (tres semanas) o más largos (seis semanas) de lo habitual, o una joven puede tener solo tres o cuatro períodos al año. La ausencia de menstruación se denomina amenorrea. Una joven debería ir al médico si todavía no ha menstruado con 15 años o tres años después de la aparición de los primeros signos de la pubertad.

Entonces, ¿cómo puede saber usted cuándo podría empezar a menstruar su hija? Probablemente usted será testigo de algunos cambios en el cuerpo de su hija que indican que se está acercando la menarquia. El desarrollo de los senos suele ser el primer signo de que una niña ha entrado en la pubertad y suele ir seguido del crecimiento del vello pubiano.

Aproximadamente un año después del inicio del desarrollo mamario, la mayoría de las niñas entran en una fase de rápido crecimiento: aumentan de estatura, su cuerpo se vuelve más curvilíneo y les crecen los pies. Luego, aproximadamente un año después del comienzo del estirón y aproximadamente dos años y medio después del inicio del desarrollo mamario, llega la menarquia.

El momento oportuno lo es todo

Probablemente es mejor que evite dar a sus hijos "la charla" sobre la menstruación. En lugar de ello, intente explicárselo en muchas conversaciones breves –enseñar cómo funciona el cuerpo humano debería ser un proceso continuo. Si no, al conceder demasiada importancia a una sola conversación, la información podría resultarles excesiva y agobiante. Cuando los niños se acercan a la pubertad, ya deberían saber qué les va a ocurrir a sus cuerpos.

Con solo dos años, los niños ya empiezan a hacer preguntas sobre su cuerpo, y sus padres deberían decirles la verdad, aunque el grado de especificidad de las respuestas debería depender del grado de madurez y de la capacidad de comprensión del niño.

A lo largo de toda la etapa infantil, los niños hacen muchas preguntas y cada una de ellas es una oportunidad que los padres deberían aprovechar para incrementar sus conocimientos. Así, no solo proporcionarán a sus hijos la información que necesitan cuando ellos la pidan, sino que también les demostrarán que están dispuestos a mantener ese tipo de conversaciones y que se sienten cómodos manteniéndolas.

Pero tampoco es necesario que espere a que sus hijos le formulen preguntas para hablar con ellos sobre la pubertad y la menstruación. Idealmente, cuando un niño está a punto de entrar en la pubertad, ya debería tener pleno conocimiento de los cambios que se producirán en su cuerpo. ¿Por qué? Los niños prefieren aprender la mayoría de las cosas de boca de sus padres. Y usted puede tener por seguro que sus hijos comentarán esos cambios con sus amigos y/o oirán comentarlos en el colegio.

Proporcionando a sus hijos una información correcta, los padres pueden tener la seguridad de que están bien informados, lo que les permitirá reconocer cualquier información errónea o tergiversada. Los niños a menudo dan a ciertos aspectos de la pubertad –sobre todo a la menstruación- una connotación negativa, como si fuera algo malo o de lo que hay que tener miedo; y, si esa es la única información que reciben, será lo único que creerán.

También es importante que los padres den a la menstruación una connotación positiva. Si una madre se refiere a la menstruación como "una lata", su hija podría hacerse una idea negativa de la experiencia. En lugar de ello, las madres pueden explicar a sus hijas que la menstruación es algo natural y una parte maravillosa de ser mujer. Después de todo, si no tuvieran la menstruación, las mujeres no podrían ser madres.

Explicar que todo el mundo es diferente también es fundamental. Por ejemplo, a su hija podría preocuparle que su cuerpo esté cambiando más deprisa o más despacio que el de sus amigas.

Aparte de entender en qué consiste la menstruación, las chicas necesitan familiarizarse con los artículos de higiene íntima femenina (compresas y tampones) y saber que a veces los períodos menstruales pueden resultar dolorosos, provocando espasmos o retortijones motivados por las contracciones de los músculos uterinos.

Otro motivo de que los niños tengan que estar informados sobre la menstruación desde bastante pronto es que las niñas que mantienen relaciones sexuales se pueden quedar embarazadas antes de empezar a menstruar. A veces, la ovulación (la liberación de un ovocito desde el ovario) puede ocurrir justo antes de que una niña tenga su primer período. Esto significa que podría ser fértil y quedarse embarazada incluso antes de menstruar por primera vez.

Preguntas habituales

Tanto los niños como las niñas suelen tener muchas preguntas sobre la menstruación, como por ejemplo:

  • ¿Por qué solo las mujeres tienen el período? Explíqueles que los niños cambian de otras formas durante la pubertad; por ejemplo, se les vuelve más grave la voz y les crece la barba. Empezar a menstruar significa poder tener hijos. La menstruación ocurre cuando tienen lugar determinados cambios en el útero, una parte del cuerpo que tienen las niñas pero no los niños.
  • ¿Tienen las mujeres el período durante toda la vida? No, las mujeres suelen dejar de menstruar entre los 45 y los 50 años de edad, lo que significa que ya no podrán quedarse embarazadas (por lo menos, ¡sin la ayuda de algunas técnicas de reproducción asistida bastante extravagantes!)
  • ¿Cuánto dura el período y cuánta sangre se pierde? Varía en función de cada chica; a algunas el período les dura solo tres días y a otras hasta una semana entera. La pérdida de sangre puede ser escasa, moderada o abundante, perdiéndose en total de dos a cuatro cucharadas de sangre (entre 30 y 59 ml). Esto también puede variar entre distintos períodos en una misma chica.
  • ¿Qué es mejor usar compresas o tampones? A la hora de elegir entre estas dos opciones, lo más importante es lo cómoda que se sienta la joven con la elección, tanto desde el punto de vista físico como psicológico. Un tampón puede resultar incómodo durante los primeros años de menstruación, cuando la pelvis y la vagina todavía están creciendo. Normalmente las chicas se sienten más cómodas utilizando primero compresas, pero muchas de ellas empiezan a preferir los tampones cuando se hacen un poco mayores (aunque no hace falta esperar a ninguna edad para usar tampones). Es posible que sus amigas hayan empezado a utilizarlos, y la mayor libertad que ofrecen puede parecerles atractiva. Todas las cajas de tampones incluyen instrucciones de uso, así que asegúrese de leerlas con su hija.

    Aunque las primeras veces que una chica intenta ponerse un tampón pueden ser frustrantes, explíquele a su hija que, con un poco de práctica, pronto le cogerá el tranquillo al proceso. Debido a que los músculos de la vagina pueden tensarse cuando una chica está nerviosa, la inserción de un tampón puede resultar difícil al principio. Es importante estar lo más relajada posible. Es una buena idea empezar con tampones finos o "mini" provistos de aplicador que resultan más fáciles de colocar. También puede ayudar intentar ponerse un tampón por primara vez el día de flujo más intenso para que resulte más fácil de colocar.
  • ¿Tienen las chicas que dejar de hacer deporte o natación mientras tienen el período? Las chicas deben tener claro que, cuando tienen el período, pueden hacer todo lo que hacen habitualmente, siempre y cuando se sientan cómodas. Por ejemplo, las chicas que practican habitualmente la natación tal vez prefieran ponerse tampones para poder practicar este deporte durante la menstruación.
  • ¿Qué es el síndrome del shock tóxico (SST)? El SST es una infección bacteriana muy poco frecuente pero grave que se puede asociar al uso de tampones. Afortunadamente, el SST asociado a la menstruación casi siempre se puede evitar cambiándose regularmente de tampón y usando los tamaños menores o los modelos de menor absorción (por ejemplo, tampones "mini" o tampones finos de flujo regular en vez de "super plus"). Una buena medida de precaución es cambiarse el tampón cada cuatro horas o más a menudo si la pérdida de sangre es abundante.
  • ¿Las chicas siempre tienen dolores menstruales durante el período? Los dolores menstruales son algo que preocupa a algunas jóvenes. Aunque la mayoría de mujeres tienen algún episodio de dolor menstrual, generalmente en forma de espasmos o retortijones abdominales, muchas de ellas no los presentan durante el primer año o los dos primeros años de menstruación. Es importante decirles a las chicas que los dolores menstruales no suelen durar más de un par de días. A veces, una bolsa de agua caliente o un baño caliente puede ayudar a aliviar las molestias. A algunas chicas también les ayuda la respiración profunda y hacer ejercicio. Si su hija tiene muchas molestias, tal vez le vaya bien tomar algún analgésico de venta sin receta médica como el ibuprofeno (por ejemplo, Advil o Motrin).
    Tener dolores menstruales durante uno o dos días en cada período menstrual es bastante frecuente, pero los síntomas de dismenorrea –una menstruación muy dolorosa que impide llevar una vida normal, interfiriendo con la asistencia a clase, los estudios o el sueño- o de cualquier otro problema menstrual deben ser comentados con el médico.
  • ¿Qué es el síndrome premenstrual? El síndrome premenstrual incluye cambios físicos y psicológicos (cambios en el estado de ánimo, tensión, irritabilidad, hinchazón y molestias en los senos) que experimentan algunas mujeres justo antes de tener el período. Pero normalmente los síntomas del síndrome premenstrual no aparecen hasta varios años después de empezar a menstruar, en el caso de que lleguen a aparecer. Para aquellas chicas que sufren de síndrome premenstrual, el reposo, hacer ejercicio y seguir una dieta equilibrada pueden ayudar.
  • ¿Tienen las chicas que practicarse duchas vaginales o ponerse desodorante en sus partes íntimas cuando tienen el período? No. De hecho, las duchas o lavados vaginales pueden incrementar las probabilidades de contraer infecciones vaginales, al alterar el equilibrio normal en la flora bacteriana que puebla la vagina.

Consejos para hablar con sus hijos sobre la menstruación

Del mismo modo que a algunos padres les da cierto apuro hablar con sus hijos sobre la menstruación, a los niños y adolescentes puede resultarles difícil explicarles a sus padres las dudas y preocupaciones que tienen sobre este tema. Si usted teme sentirse violento hablando sobre la menstruación con sus hijos, he aquí algunas pautas a seguir para que la charla resulte más fácil y fluida:

  • Busque buenos libros, vídeos o DVD didácticos sobre el tema, que pueden favorecer una conversación instructiva y distendida.
  • Pida consejo a su médico de familia sobre forma de hablar con sus hijos sobre la menstruación y la pubertad.
  • Documéntese sobre la menstruación y tenga a mano información gráfica o escrita para que puedan consultarla sus hijos.
  • Si hay alguna pregunta que le formulan sus hijos para la que usted no tiene respuesta, dígales que se informará al respecto y hágalo.
  • Coordine las charlas que mantenga con sus hijos con las clases sobre salud y educación sexual que reciben en su centro de estudios. Pregunte a sus profesores sobre el programa de estudios y pídales consejo.
  • Para romper el hielo, pruebe a hacer preguntas a sus hijos que podrían propiciar una conversación sobre el tema. Por ejemplo, ofrézcase a resolverles las dudas que puedan tener cuando pasen por el pasillo de los productos de higiene femenina en un supermercado o cuando vean un anuncio por televisión sobre un analgésico para aliviar el síndrome premenstrual.
  • Si oye a su hija mencionar algo relacionado con tener el período, propicie una conversación preguntándole dónde ha obtenido esa información. A menudo, las preguntas son una buena forma de identificar cualquier malentendido o idea errónea que pueda tener un niño.
  • Antes de llevar a su hija preadolescente a una revisión médica, coméntele que es posible que el médico le pregunte si ya tiene el período. Puede aprovechar ese momento para preguntarle si tiene alguna duda o hay algo que le preocupa sobre el hecho de que le venga la menstruación.

DIETA Y SIMDROME DE OVARIO POLIQUISTICO (SOP)

El síndrome de ovario poliquítico es un desorden que se estima afecta un 6 - 10% de la población mundial de mujeres. Si usted que ha sido diagnosticada con esta condición, es posible que haya encontrado frustrante su situación.

Hasta hace unos años era muy poco lo que se conocía, por lo que muchas mujeres no encontraban respuestas a ciertos síntomas que experimentan. Entre los más comunes, están los relacionadas a alteraciones metabólicas como aumento de peso repentino (en especial en el tronco superior), exceso de vellos en el cuerpo (cara, brazos, piernas, etc.), acné, depresión y cambios en el estado de ánimo, calvicie, infertilidad, entre otros.

Las que lo sufren pueden reconocer que definitivamente hay algo mal con su metabolismo, pero desafortunadamente muy pocas veces se identifica. La buena noticia, es que si bien todavía no se comprende completamente el origen del SOP, se ha comprendido que es desorden endocrino, y que en muchas mujeres hay un aumento en la insulina, llevando a las alteraciones metabólicas que se manifiestan como aumento de peso y adiposidad. Por lo tanto, el tratamiento nutricional puede ser clave en la resolución de muchos síntomas.

Por ejemplo, se ha encontrado que un exceso de peso, usualmente se relaciona a síntomas más severos y que una reducción de peso aún modesta puede llevar a mejoras significativas en la regularidad de la menstruación, fertilidad y características hiperandrogénicas (hirsutismo, acné, calvicie).

Síntomas

Uno de los principales complicaciones al diagnosticarlo y tratarlo es que no todas las mujeres presentan los mismos síntomas o con la misma severidad. Este es un síndrome metabólico; no afecta solamente el ovario. De hecho, presentar quistes no es una condición para el diagnóstico. Muchas mujeres no presentan un ovario poliquístico, pero sí presentan las alteraciones metabólicas características.

Principales síntomas:

Nutricionales:

  • Aumento de peso rápido y repentino, en especial en la parte superior del tronco
  • Resistencia a insulina, diabetes
  • Hiperlipidemia

Dermatológicos:

  • Hirsutismo: exceso de vello corporal
  • Problemas de la piel: acné, acantosis nigricans
  • Alergias
  • Calvicie androgénica

Emocionales

  • Depresión
  • Ansiedad
  • Cambios fuertes en el estado de ánimo

Reproductivos:

  • Ciclos menstruales irregulares
  • Sangrados vaginales anormales
  • Infertilidad
  • Abortos espontáneos

Tratamiento nutricional

Entre un 50 a 90% de las mujeres con SOP, presentan lo que se conoce como resistencia a insulina. La insulina es la hormona encargada de transportar el azúcar en sangre hacia el interior de las células donde se utiliza para energía.

La resistencia a insulina se refiere a la condición que se da cuando cantidades normales de esta hormona no son suficientes para lograr transportar el azúcar hacia el interior de las células. Simplemente las células se vuelven "perezosas" y no responden al estímulo usual.

Como consecuencia deben aumentar los niveles de insulina, lo cual lleva a todos los efectos indeseados:

  • Niveles elevados de insulina favorecen la acumulación del exceso de calorías en forma de grasa, en especial a nivel abdominal.
  • Favorecen el aumento de triglicéridos en sangre
  • Puede favorecerse una mayor ansiedad y alteraciones en el estado de ánimo. "
  • La persona experimenta constantemente hambre y necesidad por carbohidratos.
  • Puede llegarse a desarrollar diabetes tipo 2.

La clave en el manejo nutricional

Se ha demostrado que en las mujeres que presentan la resistencia a insulina, el control de niveles de insulina a través de la alimentación y/o medicamentos, incluso sin una perdida de peso consecuente, puede ayudar a restaurar la función ovulatoria, la ciclicidad menstrual y los niveles de fertilidad. También en el estado de animo, ayudando a controlar la ansiedad y depresión.

Los siguientes son los puntos más importantes de la alimentación que ayudan a controlar los niveles de insulina.

1. Consumo de alimentos de baja carga glicémica

El índice glicémico es un indicador del nivel en que elevan el azúcar en sangre los alimentos ricos en carbohidratos después de su consumo. Básicamente las harinas refinadas, alimentos altos en azúcar y vegetales harinosos (papa, yuca, etc.) son los que tienden a elevar más el azúcar en sangre. Los alimentos ricos en fibra, como harinas integrales, vegetales no harinosos, y la mayoría de las frutas, se absorben más lentamente ayudando a evitar las elevaciones abruptas.

Debido a que el azúcar en sangre se mantiene estable, se mantienen estables también los niveles de insulina. Para obtener el índice glicémico de un alimento, se compara con la respuesta del pan blanco, que es de 100. Los alimentos con un índice menor a 55 se consideran como bajo índice glicémico, entre 55 y 70 mediano, y mayor a 70 alto. La carga glicémica de los alimentos es un concepto más reciente, que refleja el potencial de elevación del azúcar en sangre en relación a la cantidad de carbohidratos que el alimento contiene. Esta información es mucho más útil. Por ejemplo, la sandía tiene un índice glicémico alto, pero una persona usualmente solo consume una tajada, la cual contiene poco carbohidrato total, por lo tanto la carga glicémica de la sandía es baja.

A pesar de que los puntos específicos relacionados al índice glicémico y carga glicémica pueden parecer complicados, el mensaje básico es simple: SIEMPRE QUE SEA POSIBLE TRATE DE REEMPLAZAR LAS HARINAS REFINADAS Y ALIMENTOS ALTOS EN AZÚCAR POR HARINAS INTEGRALES, LEGUMINOSAS Y VEGETALES NO HARINOSOS.

La siguiente es una clasificación simple de los alimentos con carbohidratos según su carga glicémica:

Alta Carga Glicémica

Mediana Carga Glicémica


Baja Carga Glicémica

  • Harinas refinadas
    • Arroz blanco
    • Pan blanco
    • Cereales de desayuno altos en azúcar
  • Repostería:
    • Galletas de paquete
    • Queques, panes, etc.
  • Confites y otros dulces
  • Vegetales harinosos:
    • Papa
    • Yuca
  • Jugos de frutas y otras bebidas altas en azúcar
  • Harinas integrales:
    • Arroz integral
    • Avena integral
    • Pan integral
    • Pasta integral o pasta regular cocida al dente
  • Algunas frutas :
    • Banano
    • Pasas
  • Algunos vegetales harinosos:
    • Camote
    • Elote
    • Plátano
    • Guineo
  • Tortilla de maíz

  • Frutas altas en fibra
  • Todos los vegetales no harinosos
  • Cereales altos en fibra
  • Leguminosas: frijoles, garbanzos, lentejas
  • Palomitas de maíz

Lo recomendable es que los principales carbohidratos de la dieta provengan de alimentos de baja y mediana carga glicémica, y consumir los alimentos de alta carga solo ocasionalmente.

2. Mantener horarios regulares de comida

Se recomienda no pasar más de 4 horas sin comer, ya que esto también favorece la descompensación de los niveles de azúcar en sangre y por lo tanto también de la insulina. Se recomienda realizar meriendas entre comidas que incluyan una fuente de proteína y un carbohidrato rico en fibra.

Ejemplos:

  • Yogurt light con fresas y 2 cdas de linaza molida
  • Pan integral con queso bajo en grasa
  • Vegetales con dip de yogurt natural descremado

3. Consumo adecuado de proteína baja en grasa

Se recomienda incluir en cada comida una fuente de proteína baja en grasa. Esto ayuda a mantenerse más saciada, controlando el apetito, y también al combinarse con los carbohidratos saludables ayuda a mantener estable el azúcar y la insulina en sangre. Las principales fuentes son:

  • Huevo cocido con poca grasa
  • Leche descremada y derivados (yogurt light, quesos hechos de leche descremada o semidescremada)
  • Pescado, atún en agua y mariscos.P
  • Pollo y pavo sin piel

Suplementos

Los suplementos que se recomiendan en mujeres con SOP son los siguientes:

1. Magnesio. Se ha observado que si se tiene un aporte bajo de magnesio en relación con calcio, entonces se puede agravar el manejo del azúcar y favorecer el desarrollo de enfermedad cardiovascular. Ser recomienda suplementar con 500 mg de magnesio al día.

2. Picolinato de Cromo. El picolinato de cromo mejora la sensibilidad a la insulina, mejorando el manejo de los carbohidratos y los niveles de azúcar en sangre. También ayuda a favorecer la saciedad, y a controlar la "necesidad" por carbohidratos que experimentan muchas mujeres. Se recomienda consumir 200 ucg una vez al día.

3. Ácidos grasos omega - 3 Estos ayudan a reducir el riesgo de enfermedad del corazón que tienen las mujeres con síndrome de ovario poliquístico. Se recomienda 1 gramo de omega - 3 al día Las cápsulas disponibles en el mercado contienen 1 gramo de aceites totales, pero solo 300 mg de omega - 3, por lo que debes consumir al menos 3 cápsulas al día para lograr obtener 1 gramo de omega - 3 por día.

4. Linaza. La linaza es también fuente de omega - 3. Ayuda a reducir los niveles de colesterol "malo" (LDL), le ayuda a mejorar su digestión. Se recomienda consumir la semilla molida, 2 - 5 cucharadas al día.

¿QUE ES LA HISTERECTOMIA?

Una histerectomía es una operación para extraer el útero (matriz) de la mujer. El útero es el lugar donde se desarrolla el bebé cuando la mujer se embaraza. Algunas veces se extraen las trompas de Falopio, los ovarios y el cuello del útero al mismo tiempo que se extirpa el útero. Estos órganos se localizan en el bajo vientre de la mujer (vea la imagen a continuación.) El cuello uterino se encuentra en el extremo inferior del útero. Los ovarios son los órganos que producen los óvulos y las hormonas. Las trompas de Falopio llevan los óvulos de los ovarios al útero.

Si todavía no llega a la menopausia, una histerectomía evitará que usted sangre cada mes (períodos.) Tampoco podrá quedar embarazada. Existen varios tipos de histerectomía:

  • Una histerectomía completa o total extirpa el cuello uterino así como el útero. Este es el tipo más común de histerectomía.

  • Una histerectomía parcial o subtotal (llamada también histerectomía supracervical) extrae la parte superior del útero y deja el cuello uterino en su lugar.

  • En una histerectomía radical se extrae el útero, el cuello uterino, la parte superior de la vagina y sus tejidos de apoyo. Este procedimiento se realiza en algunos casos de cáncer.

A menudo se extraen uno o ambos ovarios y las trompas de Falopio al mismo tiempo que se realiza una histerectomía. Cuando se extraen ambos ovarios y ambas trompas de Falopio, el procedimiento se llama salpingo-oforectomía bilateral.

Si se extraen los ovarios en una mujer antes de que llegue a la menopausia, la repentina pérdida de su principal fuente de hormonas femeninas le causará que entre súbitamente a la menopausia (menopausia quirúrgica.) Esto puede ocasionar síntomas más graves que una menopausia natural.

¿Hasta qué punto son comunes las histerectomías?

La histerectomía es el segundo tipo de cirugía mayor más común entre las mujeres de los Estados Unidos. (La cirugía mayor más común entre las mujeres de los Estados Unidos es el parto por cesárea.) Anualmente, se realizan más de 600,000 histerectomías. Cerca de la tercera parte de las mujeres en los Estados Unidos han tenido una histerectomía antes de llegar a los 60 años de edad.

¿Cómo se realiza una histerectomía?

Las histerectomías se realizan por medio de un corte en el abdomen (histerectomía abdominal) o en la vagina (histerectomía vaginal.) A veces se usa un instrumento llamado laparoscopio para ayudar a ver el interior del abdomen. El tipo de cirugía que se realice depende de la razón de la cirugía. Las histerectomías abdominales son más comunes que las histerectomías vaginales y normalmente requieren de un tiempo de recuperación más largo.

¿Por qué se someten las mujeres a la histerectomía? ¿Existen alternativas?

Las histerectomías se realizan más comúnmente por las siguientes razones:

  • Fibromas uterinos. Los fibromas son tumores comunes benignos (no cancerosos) que crecen en el músculo del útero. El mayor número de histerectomías se realiza a causa de la aparición de fibromas que por cualquier otro problema del útero. A menudo, los fibromas no causan síntomas y no requieren tratamiento y normalmente se encogen después de la menopausia. Pero, en ocasiones los fibromas causan fuerte sangrado o dolor.

    Existen alternativas a la histerectomía para tratar los fibromas, lo que puede ser especialmente importante para las mujeres jóvenes que esperan tener hijos. A veces los fibromas se tratan con medicina u otros tipos de tratamiento planeados para encoger dichos tumores. Sin embargo, esto es solamente temporal - cuando se suspende la medicina, los fibromas volverán a crecer. Un tipo de cirugía para extraer únicamente los fibromas sin extraer el útero se llamamiomectomía. Un procedimiento relativamente nuevo para encoger los fibromas se llama embolización de la arteria uterina. Este procedimiento consiste en colocar pequeñas partículas de plástico en los vasos sanguíneos que alimentan a los fibromas.

  • Endometriosis. Esta es otra condición benigna que afecta al útero. La endometriosis es la segunda razón principal para la realización de histerectomías. Es más común en mujeres mayores de treinta y menores de cincuenta años de edad, especialmente en mujeres que nunca se han embarazado. La endometriosis ocurre cuando el tejidoendometrial (el revestimiento interior del útero) comienza a crecer fuera del útero y sobre órganos adyacentes. Esta condición puede causar períodos menstruales dolorosos, sangrado vaginal anormal y algunas veces pérdida de la fertilidad (capacidad de embarazarse.) Normalmente, la endometriosis no es un problema para las mujeres que ya han pasado por la menopausia.

    Las mujeres con endometriosis muchas veces reciben tratamiento con hormonas y medicinas que reducen sus niveles de estrógeno. Puede realizarse una cirugía para extraer los parches de tejido endometrial que causan los síntomas, usando un laparoscopio o por medio de un corte más amplio en el abdomen (laparotomía.) Como regla general una histerectomía no se realiza a menos que haya fallado algún otro tratamiento.

  • Prolapso del útero. Esta es una condición benigna en la cual el útero se desplaza de su lugar normal hacia la vagina. El prolapso del útero es causado por el debilitamiento y ensanchamiento de los ligamentos y tejidos pélvicos. También pueden afectarse otros órganos como la vejiga. El alumbramiento, la obesidad y la pérdida de estrógeno después de la menopausia pueden contribuir a la aparición de este problema. El prolapso del útero representa cerca del 16 por ciento de las histerectomías realizadas.

    El tratamiento puede incluir terapia de estrógeno, ejercicios para fortalecer los músculos del piso de la pelvis o el uso de un pesario, que es un anillo de plástico insertado por la vagina para ayudar a sostener el útero en su lugar. En casos más graves, la cirugía puede restaurar los órganos hundidos a su ubicación normal y reparar los tejidos de apoyo. En ocasiones puede realizarse la histerectomía si el prolapso está causando problemas graves.

Los tipos de cáncer que afectan a los órganos de la pelvis representan cerca del diez por ciento de todas las histerectomías realizadas. El cáncer endometrial (cáncer del revestimiento del útero), el sarcoma uterino, el cáncer cervical (cáncer del cuello del útero) y el cáncer de los ovarios o de las trompas de Falopio requieren a menudo de una histerectomía. También pueden usarse otras clases de tratamiento como la radiación o terapia con hormonas dependiendo del tipo y extensión del cáncer.

Otras razones por las cuales se realizan las histerectomías incluyen dolor pélvico crónico, abundante sangrado durante o entre los períodos y la enfermedad pélvica inflamatoria crónica.

¿Qué debo hacer si me dicen que necesito una histerectomía?

Si usted sufre de una condición que no sea cáncer, como fibromas, endometriosis o prolapso del útero, muchas veces hay otros tratamientos que deberían probarse primero. En la mayoría de los casos, no es necesario hacerse una histerectomía inmediatamente. Hay tiempo para que usted reciba más información y busque otras alternativas.

En casos de enfermedades graves, como el cáncer, puede ser que la histerectomía sea requerida e incluso pueda salvarle la vida. Antes de decidir qué hacer, es importante que entienda su condición y sus opciones para enfrentarla.

Si sufre de problemas continuos y severos de dolor pélvico y sangrado uterino anormal, y otros tratamientos no le han ayudado, una histerectomía puede darle un grato alivio. Los estudios han demostrado que una histerectomía a menudo mejora el funcionamiento sexual y la calidad de vida de las mujeres que sufren de estos problemas.

Por otro lado, algunas mujeres sufren de serias complicaciones, e incluso la muerte, a partir de una histerectomía. La mayoría de complicaciones son menos serias, y pueden incluir reacciones a la anestesia, dolor, infección, sangrado y fatiga. Algunas veces otros órganos pélvicos como la vejiga y el intestino se lesionan durante una histerectomía. La histerectomía también se relaciona con la incontinencia urinaria (problemas para retener la orina), la pérdida de la función ovárica y la menopausia precoz. Algunas mujeres sufren de depresión y disfunción sexual después de una histerectomía.

Si le dicen que debe someterse a una histerectomía:

  • Hable con su proveedor de cuidado médico acerca de sus opciones. Pregunte sobre otros tratamientos disponibles para su condición.

  • Considere buscar una segunda opinión de otro proveedor de cuidado médico.

  • Pregunte sobre posibles complicaciones de la cirugía.

  • No olvide que cada mujer y cada situación son diferentes. Una buena elección de tratamiento para una mujer no necesariamente es la mejor elección para otra.

  • Trabaje con su proveedor de cuidado médico para elegir el tratamiento más indicado en su caso. Si mi cuello uterino es extirpado en mi histerectomía,

¿Seguiré necesitando la prueba del Papanicolaou?

Si se somete a una histerectomía total, en la cual el cuello uterino ha sido extirpado junto con el útero, normalmente no necesitará hacerse la prueba del Papanicolaou. Una excepción es si su histerectomía se realizó a causa del cáncer cervical o sus precursores. Pregunte a su proveedor de cuidado médico si necesita hacerse pruebas de Papanicolaou periódicamente. Es importante que todas las mujeres que han tenido una histerectomía se sometan a exámenes ginecológicos regulares como parte de su cuidado médico.

DISMENORREA

La dismenorrea es un trastorno menstrual caracterizado por dolores menstruales severos y frecuentes asociados con la menstruación. La dismenorrea puede clasificarse como primaria o secundaria.
  • dismenorrea primaria - se presenta desde el comienzo y suele durar toda la vida; dolores menstruales severos y frecuentes provocados por contracciones uterinas severas y anormales.
  • dismenorrea secundaria - se presenta a raíz de alguna causa física y suele iniciarse más tardíamente; períodos menstruales dolorosos provocados por otra patología clínica (por ejemplo, enfermedad pélvica inflamatoria, endometriosis).

¿Cuáles son las causas de la dismenorrea?

La causa de la dismenorrea depende de si el trastorno es primario o secundario. En general, las mujeres con dismenorrea primaria experimentan contracciones uterinas anormales como resultado de un desequilibrio químico en el cuerpo (particularmente la prostaglandina y el ácido araquidónico - ambas sustancias químicas controlan la contracción del útero). La dismenorrea secundaria es causada por otros trastornos clínicos. El más frecuente es la endometriosis (un trastorno en el cual un tejido similar al del endometrio se implanta fuera del útero, generalmente en otros órganos genitales dentro de la pelvis o en la cavidad abdominal, provocando frecuentemente sangrado interno, infección y dolor pélvico). Otras posibles causas de la dismenorrea secundaria incluyen:

  • la enfermedad inflamatoria pélvica
  • los fibromas uterinos
  • un embarazo anormal (por ejemplo, abortos espontáneos, ectópicos)
  • las infecciones, los tumores o los pólipos en la cavidad pélvica

¿Quiénes corren riesgo de sufrir dismenorrea?

Si bien todas las mujeres corren el riesgo de sufrir dismenorrea, las siguientes mujeres son más propensas a padecer este trastorno:

  • mujeres que fuman
  • mujeres que beben alcohol durante el período menstrual (el alcohol tiende a prolongar el dolor menstrual)
  • mujeres con sobrepeso
  • mujeres que comenzaron a menstruar antes de los 11 años de edad

Consulte a su médico para obtener más información.

¿Cuáles son los síntomas de la dismenorrea?

A continuación se enumeran los síntomas más comunes de la dismenorrea. Sin embargo, cada adolescente puede experimentarlos de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir:

  • cólicos en la parte inferior del abdomen
  • dolor en la parte inferior del abdomen
  • dolor lumbar
  • dolor irradiado hacia las piernas
  • náuseas
  • vómitos
  • diarrea
  • fatiga
  • debilidad
  • desmayos
  • dolores de cabeza

Los síntomas de la dismenorrea pueden parecerse a los de otros trastornos o problemas médicos. Consulte siempre a su médico para obtener un diagnóstico.

¿Cómo se diagnostica la dismenorrea?

El diagnóstico comienza con la evaluación de los antecedentes médicos por parte del ginecólogo y con un examen físico completo que incluye un tacto vaginal. Sólo se puede estar seguro del diagnóstico de dismenorrea cuando el médico descarta otros trastornos menstruales, cuadros clínicos o medicamentos que podrían estar causando o agravando la patología. Además, los procedimientos para el diagnóstico de la dismenorrea pueden incluir:

  • ecografía (También llamada sonografía.) - técnica de diagnóstico por imágenes que utiliza ondas sonoras de alta frecuencia y una computadora para crear imágenes de vasos sanguíneos, tejidos y órganos. Se utiliza para ver el funcionamiento de los órganos internos y para evaluar el flujo sanguíneo a través de diversos vasos.
  • imágenes por resonancia magnética (IRM) - procedimiento de diagnóstico que utiliza una combinación de imanes grandes, radiofrecuencias y una computadora para producir imágenes detalladas de los órganos y las estructuras internas del cuerpo.
  • laparoscopía - procedimiento de cirugía menor en el cual se inserta un laparoscopio, tubo pequeño con una lente y una luz, dentro de una incisión en la pared abdominal. Utilizando el laparoscopio para ver dentro del área pélvica y abdominal, el médico con frecuencia puede detectar crecimientos anormales.
  • histeroscopía - examen visual del canal cervical y del interior del útero usando un instrumento para ver (histeroscopio), insertado a través de la vagina.

Tratamiento para la dismenorrea:

El tratamiento específico para la dismenorrea será determinado por su médico basándose en lo siguiente:

  • su edad, su estado general de salud y sus antecedentes médicos
  • la gravedad del trastorno
  • la causa del trastorno (primaria o secundaria)
  • su tolerancia a ciertos medicamentos, procedimientos o terapias
  • las expectativas para la evolución del trastorno
  • su opinión o preferencia

El consejo de su médico sobre los síntomas puede aumentar su entendimiento y llevarle a practicar actividades para el control del estrés. Otros posibles protocolos de tratamiento para manejar los síntomas de la dismenorrea en las mujeres jóvenes incluyen:

  • inhibidores de la prostaglandina, es decir, medicamentos antiinflamatorios no esteroides (su sigla en inglés es NSAID), como la aspirina o el ibuprofeno, para reducir el dolor
  • acetaminofén
  • anticonceptivos orales (inhibidores de la ovulación)
  • progesterona (tratamiento hormonal)
  • modificaciones en la dieta (para aumentar el consumo de proteínas y disminuir el de azúcar y cafeína)
  • suplementos vitamínicos
  • ejercicio regular
  • almohadilla térmica sobre el abdomen
  • baño o ducha caliente
  • masaje abdominal

MENSTRUACION


Menstruación

La menstruación comienza durante la pubertad y se le conoce comúnmente como la regla. Esto ocurre cuando las mujeres secretan un fluido con sangre del útero como parte del ciclo de menstruación. Durante los primeros dos años, probablemente las reglas no sean regulares. Esto ocurre debido a que los niveles hormonales del cuerpo aún están cambiando y es posible que la ovulación no ocurra todos los meses. Después de eso, las reglas por lo general son más regulares (normalmente ocurren casi en la misma fecha todos los meses).

La primera regla menstrual se llama la “menarquía” o “menarca”. En los Estados Unidos la edad promedio de la menarquía es 12 años y medio. Esto significa que desde la menarquía hasta la menopausia, que es cuando la mujer ya no puede menstruar, es posible que ocurra un embarazo.

Todos los meses, el ovario de la mujer libera un óvulo o célula. Éste viaja por la trompa de Falopio hasta el útero. El útero ya se ha estado preparando para recibir a un embrión, por lo que el revestimiento interno del útero (endometrio) ha aumentado de grosor.

Si el óvulo es fertilizado por el espermatozoide masculino, esto ocurre en la trompa de Falopio. Luego, durante los próximos tres días el nuevo embrión viaja el resto de la distancia bajando por la trompa de Falopio, entra al útero y se adhiere a las paredes del útero. El revestimiento del útero protege y alimenta al feto mientras éste se desarrolla.

Si el óvulo no es fertilizado o si éste no se logra adherir a las paredes del útero, entonces comienza la menstruación y el revestimiento del endometrio desecha su capa de la superficie y es eliminado del cuerpo como fluido de sangre. Normalmente, la expulsión de estos tejidos dura de tres a siete días. Esto es la menstruación. El útero es un músculo que puede “contraerse” o “acalambrarse” cuando sale el fluido menstrual del cuerpo. Existen medicamentos sin receta médica para aliviar los dolores menstruales.

Los productos sanitarios absorben el fluido menstrual cuando sale del cuerpo. Los dos tipos de productos sanitarios son las toallas y los tampones. Las toallas sanitarias absorben el fluido menstrual cuando sale del cuerpo. Los tampones absorben el fluido en el interior de la vagina.

El proceso menstrual o ciclo completo dura 28 días. No obstante, algunas mujeres tienen ciclos que duran hasta 34 días o ciclos cortos de 19 días. La menstruación o sangrado por lo general dura de 3 a 7 días.

El fluido menstrual no tiene mal olor. Pero cuando el fluido menstrual entra en contacto con el aire hace que la bacteria crezca. Esto puede producir olor, de modo que es muy importante bañarse regularmente durante la menstruación.

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